Ismael Athuman y diez más. José Mel Pérez, máximo responsable técnico de la UD, confirmó la titularidad del zaguero canterano que debutará mañana como profesional en el primer equipo ante la SD Ponferradina (15.00 horas, Movistar LaLiga). "Jugará Ismael. La gente debe saber que tenemos muchas bajas y es difícil mantener un once. Eric Curbelo [sanción], Javi, Kirian o Silva, que acabó mal ante el Lugo, no estarán". A esta relación de ausencias cabe sumar las ya conocidas de Sergio Araujo, Pejiño, Ruiz y Aythami Artiles. 

En relación al mercado invernal -que se abre el próximo enero-, dejó un silencio revelador. "Es una buena pregunta, pero no voy a contestar. Reclamo respeto porque nos quedan cuatro partidos para finalizar el año 2020. Ahora es tiempo de competir y de desprender ilusión. Faltan tres partidos de Liga y uno de Copa [ante Ponferradina, Alcorcón, Rayo y el de la cita del KO ante el Varea de Logroño]. Me ilusiona ese torneo. Sí es cierto que hay jugadores que deben proyectarse y dar un paso al frente. Ahora mismo no hablo de fichajes. Solo pienso en irme de Navidades con el mayor número de puntos posibles". La Ponferradina ocupa plaza de playoff de ascenso y encadena cinco jornadas sin perder. De local contabiliza cuatro victorias pero ha encajado 11 goles. ¿Ahí radica el punto débil de la Deportiva? Mel reitera que es un hueso durísimo de roer. "La Ponferradina compite de memoria. Es un bloque solidario, que destaca por el ímpetu en el balón dividido. Ya los conocemos del año pasado [la UD logró imponerse 0-2 en El Toralín]. Debemos equilibrar su entrega, es el único camino válido".

La UD tiene dos puntos más en su casillero en relación al curso pasado -en este punto del calendario de 16 jornadas disputadas-. Mel realza la humildad de la propuesta actual, que no dispone de activos como Viera, Narváez o Rubén Castro. "Esta plantilla es más humilde y joven; hay jugadores cobrando el mínimo. La afición no puede dudar de la honestidad de este grupo. Con el tiempo, nos darán más alegrías que tristezas. Hay que ser pacientes". No quiso fiscalizar la elevada nómina de errores en este curso en tareas defensivas -el último, el penalti cometido por Jonathan Silva en el Anxo Carro, es la sexta pena máxima de esta campaña-. "

Para Mel, no es justo "señalar" a un futbolista por la nómina de goles encajados (23). "Cuando conformas una plantilla; son los mejores. Todos los conjuntos de Segunda reciben goles por error o una concesión individual. No se señala a nadie (...) Aquí cobran el sueldo mínimo en Segunda. Somos honestos. Reclamo la confianza plena de la afición: habrás más días felices que tristes". 

El estratega madrileño, que solo ha ganado un partido lejos de la Isla en 2020, quiso matizar su justificación en relación a los guarismos foráneos. Insiste que la UD juega igual en el Gran Canaria que en la Península. No hay truco -de local, en esta campaña, los amarillos ya suman cinco triunfos, por los cero de visitante-. "No sé cómo decirlo, jugamos igual en casa que fuera. No modificamos nada. Y menos ahora que compites lejos de tu estadio sin público. No cambiamos la propuesta de jugar de local o visitante. Nos faltó fortuna ante el Girona, se nos escapó por los pelos (...) Da igual jugar en el Gran Canaria que en El Toralín. Hay que mantener un elevado grado de intensidad".  Se le cuestionó por su confianza en la figura de Álex Domínguez. "Lleva tres encuentros a mis órdenes y cero derrotas [ante Extremadura, en la pasada campaña, Sporting y Lugo]. Lo está haciendo bien".