La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Araujo y Sergio Ruiz, rotos

Ambos, indiscutibles para Pepe Mel, estarán de baja como mínimo durante un mes por sendas roturas musculares | A Pejiño, en cambio, se le espera para la cita de Lugo

Araujo y Sergio Ruiz, rotos

Los contratiempos para la UD Las Palmas se suceden y traducen no sólo en los resultados –una victoria en los últimos siete partidos y dos derrotas seguidas–, sino también en las lesiones. El último en caer fue Sergio Ruiz, el mejor fichaje del cuadro amarillo este curso e indiscutible para Pepe Mel, que se suma a Sergio Araujo, otro de los titulares fijos, como bajas para el próximo mes de competición. Ambos están rotos.

Cuando el santanderino se llevó la mano a la ingle en el minuto 77 del choque del miércoles ante el Mirandés todos temieron lo peor. Se confirmó después: rotura en el aductor y fuera, como mínimo, durante cuatro semanas, salvo que la recuperación sea más rápida de lo normal o se quiera forzar su regreso. El hecho de jugar dos partidos seguidos en cuatro días volvió a pasar factura a la UD. Sin anteriormente cayeron el Chino y Pejiño tras jugar frente al Almería y el Castellón, ahora le tocó a Sergio Ruiz.

El caso de Araujo, por su parte, es diferente, puesto que ya suma tres lesiones musculares en tres zonas distintas. Había arrancado muy bien la temporada, con cuatro goles en seis partidos, hasta que se rompió el aductor izquierdo ante el cuadro castellonense. Sin estar recuperado del todo, jugó diez días después frente al Oviedo y en un entreno previo a la cita de Gerona se lesionó el otro, lo que le obligó a ausentarse en Montilivi y en el derbi.

Y en Sabadell, donde partió desde el banquillo pero entró en la primera parte por decisión técnica de Mel, lo que se rompió en esta ocasión fue el isquio, la lesión por la que no estuvo el miércoles ni estará, seguramente, hasta enero de 2021. Su situación n es un misterio: tres lesiones musculares distintas en poco más de un mes. Mel aludió al mal estado del césped de los campos de Barranco Seco como factor determinante en los percances de los futbolistas, pero los hechos, por lo menos con el argentino, demuestran que debe de haber otro un motivo.

El argentino ha sufrido tres lesiones distintas en poco más de un mes de competición

decoration

El caso es que ni Sergio Ruiz ni Araujo estarán pasado mañana en el choque, otra vez en casa, ante el Sporting de Gijón (20.00 horas, Gol), como tampoco lo estará Francisco Jesús Crespo Pejiño, aquejado de un problema en el tobillo. El barbateño había sufrido una rotura en el isquio durante los pocos minutos que disputó en Cartagena después de haber completado dos encuentros enteros en cuatro días, pero cuando iba a regresar en Sabadell se torció la articulación la semana pasada durante un entreno.

El andaluz, otro de los fijos para el técnico, y de las incorporaciones que mejores sensaciones ha dejado junto a Ruiz y Rober, todavía se recupera y, en principio, estará disponible para la cita de Lugo el próximo miércoles.

Tres fijos

Así pues, Mel no podrá disponer de tres de sus hombres clave para la visita del conjunto gijonés, cuarto en la clasificación a tan sólo dos puntos del líder, el Mallorca. No parece el rival indicado para terminar con la primera crisis amarilla de la temporada, ya que sólo ha sumado cinco puntos de los últimos 21. La victoria en el derbi (1-0) gracias al regalo escandaloso de Adrián Ortolá pareció cerrar la mala racha, pero sucedió todo lo contrario: le siguieron dos derrotas seguidas por primera vez tras catorce jornadas.

Sin embargo, Sergio Ruiz, Araujo y Pejiño no son las únicas bajas de la UD para recibir al Sporting. Tampoco estarán Tomás Cardona, que por otra rotura muscular –hace ya un mes– no podrá volver a los terrenos de juego hasta dentro de varias semanas, ni Ale Díez, que se recupera de una operación un dedo del pie y volverá en enero. En total, cinco lesionados, aunque hombres como Clau Mendes, Rober o Maikel Mesa también han caído en este tramo inicial.

El técnico recibe la última lesión, la de Ruiz, con la desesperación del que sabe que ha perdido a su extensión en el campo en el momento más crítico del equipo. Ahora le corresponde buscar fórmulas para suplir al jugador que mejor crea y que, además, marca –dos goles–. Pierde a la brújula y pierde el gol. Y por un mes.

Compartir el artículo

stats