Un fugitivo que provocó una importante persecución internacional cuando se dio a la fuga después de que supuestamente trató de atropellar a los peatones en Kent ha sido acusado de intento de asesinato. Bradley Knapp fue nombrado como uno de los 'más buscados' del Reino Unido después de que, según los informes, lanzara su vehículo contra varios peatones en una céntrica calle de la británica de Kent, al sureste del país. La fiscalía le ha acusado, recientemente, de intento de asesinato, después de que fuera detenido por la Policía Nacional en el sur Tenerife el pasado 29 de septiembre y extraditado a su país.
A su regreso al Reino Unido, ha sido acusado de intento de asesinato, lesiones corporales graves, causar lesiones graves por conducción peligrosa y obstrucción a la justicia.
Según informó The Daily Mail, dos de las víctimas quedaron con heridas graves tras el incidente del pasado 11 de octubre de 2019.
Además, la búsqueda de este joven de 26 años se remonta al verano de 2016, cuando varios policías le dieron el alto tras observarlo en el asiento del conductor de un vehículo inhalando óxido nitroso. En ese momento emprendió la huida conduciendo de forma temeraria y a gran velocidad por zonas residenciales, arremetiendo contra varios vehículos –entre ellos, uno policial- y otros objetos de la calzada. Al bajarse se inició una persecución a pie, provocando lesiones a los agentes actuantes y oponiendo gran resistencia a su detención. Además, la investigación evidenció que el vehículo que conducía figuraba como sustraído y llevaba matrículas dobladas.
Ha sido puesto en prisión preventiva para comparecer en el Tribunal de la Corona de Maidstone el 24 de noviembre.
