Las Casas Consistoriales se iluminarán este jueves con motivo del Día Internacional del ictus, una enfermedad que cambia radicalmente la vida de los afectados y de sus familias en cuestión de segundos. La Asociación de Daño Cerebral Adquirido de Gran Canaria (Adacea GC) asegura que el 60% de las personas que sufren un problema cerebrovascular necesitarán ayuda para el resto de su vida y que 3.500 personas en Canarias sufrirán un ictus este año.

El Ayuntamiento se teñirá de color naranja a las 19.00 horas para dar mayor visibilidad a esta problemática, concienciar y apoyar a las más de 120.000 personas que sufren un ictus en nuestro país cada año.

La asociación sostiene que este problema tiene un gran impacto sanitario y social debido a una elevada incidencia y prevalencia, y también a que constituye la primera causa de discapacidad adquirida en adultos. Además, supone una gran carga, no solo desde el punto de vista sanitario, sino también personal y familiar, por su impacto en la vida de las personas que lo sufren y en la de sus cuidadores.