Las empresas que construyen la segunda fase de la nueva carretera de La Aldea, el tramo entre Agaete y El Risco, empezarán a utilizar explosivos para las excavación de los túneles en la primera quincena de noviembre, según informó ayer el Foro Roque Aldeano. Hasta ahora solo se habían utilizado en la apertura de los accesos a las bocas de los túneles.

El colectivo vecinal, que hace un seguimiento minucioso de las obras, precisó que ya está todo preparado, pues se dispone de la autorización para el uso de los polvorines. Los técnicos especialistas ya están estudiando la zona para proceder al empleo de la dinamita tipo gel.

Las explosiones comenzarán en las bocas norte de los túneles de Faneque, situadas en el barranco de Segura, y también en la boca sur de Guguillo, cerca del nuevo túnel de La Aldea. En cada uno de estos tres tajos se avanzarán unos metros diarios, lo que revela que es un método mucho más productivo que la maquinaria utilizada actualmente, con la que se progresa apenas unos dos metros diarios.

Comienza el uso de explosivos en la excavación de los túneles de La Aldea

En cuanto a la boca norte de Guguillo, la orientada al barrio de El Risco, de momento se continuará con la maquinaria, ya que el terreno es blando y se está avanzando sin dificultades. Respecto a las bocas sur de Faneque, Roque Aldeano ha constatado que el acceso está muy adelantado y que pronto se iniciarán los correspondientes embocamientos para también ahondar mediante explosivos.

“Para entonces esperemos que se trabaje toda la semana, las 24 horas del día, tal como se han comprometido los responsables de la Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, para recuperar los casi tres meses de retraso en el uso de explosivos, motivado por la paralización de los polvorines”, apunto el Foro.

Las obras avanzan


En el tramo entre Agaete y El Risco ya son visibles las bocas de los túneles que atravesarán el Macizo de Faneque, en la imagen de la izquierda, y la zona conocida como Guguillo, donde se enlaza con la primera fase construida de la nueva carretera de La Aldea. En el interior de ambos túneles se inicia en noviembre el uso de explosivos de dinamita para avanzar más rápido.