Adaptar el marco normativo a la situación actual con el objetivo de que la extensa burocracia no aleje de Canarias proyectos que quieren impulsar la sostenibilidad en el territorio, pero que en la actualidad no encuentran una cobertura legal a la que acogerse. Este es uno de los objetivos que se ha marcado el consejero de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno canario, José Antonio Valbuena, quien considera que uno de los grandes retos de las administraciones públicas sigue siendo la desburocratización, ya que “continuamos siendo muy lentos a la hora de viabilizar diferentes expedientes y proyectos”.

Así lo puso de manifiesto ayer el propio consejero en el foro Sostenibilidad, modelo empresarial rentable y de futuro, organizado por Prensa Canaria, en colaboración con el BBVA. Valbuena estima necesario que el Gobierno de Canarias “esté atento y con el radar puesto” para que “no tengamos en Canarias un cuerpo normativo pesado en su aplicación sino ágil, que permita dar cobertura legal a estos proyectos”. Unas iniciativas empresariales que hoy en día no solo encuentran un vacío legal en muchas ocasiones, sino incluso puede tener que afrontar obstáculos para poder desarrollarse.

El consejero regional añadió que la agilización de la gestión por parte de las administraciones públicas será también fundamental para la movilización de los fondos de reconstrucción europeos. Unas ayudas, que inciden de forma directa en actuaciones que promueven la sostenibilidad, y de las que España recibirá 140.000 millones de euros, de los que 70.000 serán en forma de ayudas directas y el resto como préstamos que el Estado deberá devolver.

Valbuena mantiene que cumplir con la nueva norma contra el cambio climático será “sencillo”

Valbuena destacó que este fondo de reconstrucción no solo exigirá capacidad de gestión a las administraciones públicas, sino también al sector privado, ya que incidió en que tanto por parte del Gobierno central como por el Ejecutivo regional va a existir un compromiso “para hacer partícipe al sector privado”.

De hecho, anunció que este lunes el Gobierno de Canarias ha convocado a representantes de las principales organizaciones empresariales a una reunión en la que se empezarán a trasladar ideas para la utilización de estos fondos para que “parte de esa capacidad de gestión podamos depositarla en el sector privado”.

Valbuena subrayó el importante papel que tendrán las entidades financieras de aquí en adelante para fomentar todo tipo de proyectos que promuevan el desarrollo sostenible. “Previsiblemente para la materialización de los fondos se va a exigir una prefinanciación por parte de diferentes administraciones públicas”, aseguró, aunque puntualizó que esto todavía no ha sido concretado por Bruselas ni por el Gobierno de Sánchez. Sin embargo, sí reiteró que “parece lógico pensar que las entidades financieras en España van a jugar un papel que clave para poder conseguir estos objetivos”.

Variable financiera

El consejero también puso sobre la mesa la necesidad de que la sostenibilidad comience a ser una variable a tener en cuenta a la hora de aprobar la financiación de ciertas inversiones. “Más pronto que tarde, los grandes núcleos de decisión deberán empezar a valorar la sostenibilidad de las inversiones que necesiten financiación”, concretó, ya que se movilizarán modelos por parte de la Unión Europea, que finalmente se acabarán convirtiendo en productos financieros que gestionarán las entidades bancarias.

Valbuena consideró que “ninguna inversión puede ser sostenible si no hay un equilibrio entre los objetivos económicos, sociales y medioambientales”, aunque detalló que dependiendo del sector en el que se analice “esto tendrá perspectivas diferentes”, pero advirtió que “desde el punto de vista de los mercados financieros es una variable que se debe que introducir”.

La lucha contra los efectos del calentamiento global es uno de los grandes retos del siglo XXI

Además, señaló que con este tipo de medidas, las empresas y las entidades financieras estarán cumpliendo con uno de los objetivos marcados para este siglo XXI, ya que “al final también se estará velando por las generaciones futuras por parte de todas estas entidades”.

Valbuena aseguró que el principal reto de este siglo es la lucha contra el cambio climático para “garantizar la vida en el planeta en el siglo XXII”.

Por eso, insistió en que “las políticas de acción climática se diseñan con luces muy largas”, para que las distintas iniciativas se vayan graduando a medida que se vaya avanzando.

La humanidad se enfrenta al gran reto de adaptar los modelos actuales a los efectos del cambio climático, ya que la actuación del ser humano en el pasado, hará notar los efectos a lo largo de todo este siglo. “Cada década que pase se notarán con mayor virulencia”, aseguró Valbuena y lamentó que serán cada vez más negativos.

Por eso, el consejero sostuvo que a la generación actual “nos toca convivir con la materialización de estos efectos”, pero puntualizó que además tiene un segundo objetivo: “empezar a cambiar nuestro rumbo para recuperar la armonía del ser humano con el entorno natural”. Por lo que, es en este momento cuando se debe pasar “de la sobreexplotación de los recursos naturales a recuperarse de la que han realizado las generaciones pasadas”.

Según Valbuena este es el mayor acto de generosidad que una generación puede tener con las futuras y que va a suponer “cambios en todos los sectores”. Por lo que deberán transformarse muchos modelos de negocio, muchas empresas tendrán que reconvertirse, pero además se crearán modelos de negocio nuevos a medida que vayan a apareciendo en escena las nuevas normativas medioambientales y de lucha contra el cambio climático que se están gestando tanto a nivel nacional y autonómico.

El consejero cree que la sostenibilidad debe ser introducida como una variable financiera

Además, el consejero manifestó que en esta lucha todos los sectores de la sociedad “van a tener que jugar un papel” y por eso la nueva ley canaria de Cambio Climático incidirá en todos y cada uno de los sectores.

El Gobierno de Canarias aprobó recientemente el anteproyecto de esta normativa, que entre otras medidas contempla dedicar un 2% del Producto Interior Bruto (PIB) de Canarias a acciones contra el cambio climático, así como la descarbonización de las Islas con el año 2040 como horizonte. Además, contempla la obligatoriedad para algunas empresas de inscribirse en el Registro Canario de Huella de Carbono o la elaboración de planes de movilidad sostenible para los grandes centros de trabajo.

Con todo, Valbuena aseguró que se tratará de una norma que será sencillo cumplir “a pesar de las voces que se pudieran levantar”.

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