La pasión de Jennifer Déniz es el calzado, los "taconazos", como ella los llama. En cada viaje siempre venían algunos en la maleta o cuando viajaban los amigos les pedía unos "superaltos y extravagantes". "Así comencé, por querer abrir una tienda con zapatos que traje de Los Ángeles, algo diferente a lo que había en la Isla y que solo se podía encontrar en Dhenissian. La moda la fui incluyendo poco a poco", relata Déniz.
Dhenissian Shop es el proyecto de Jennifer que con el lema 'gustoni o no gustoni' crece gracias a las redes sociales. "Para mí son el 80% de mi negocio. Sin ellas pienso que no hubiera podido llegar donde estoy pero creo que me he estancado por estar en Canarias, ya que es muy difícil enviar a la Península sin subir los precios", afirma Déniz, que ha vivido la dificultad de ser emprendedora y mujer. "No es que sea difícil sino que no es lo normal sin ser hija de o mujer de y sin ponerle adjetivos despectivos a lo que he tenido que hacer para llegar donde he llegado. Es triste pero es así: después de seis años a veces sigo defendiéndome de mil ataques", relata Jennifer, quien no puede ocultar el orgullo de lo conseguido en este tiempo. "Que alguien que admiro por su negocio y lo grande que es se haya puesto en contacto conmigo para abrir tienda en sus centros comerciales me sorprende. Me ha pasado con el señor Amid Achi y con los dueños de Fund Grube; me parece increíble que gente tan importante me conozca y me proponga negocio", concluye.
