Cruz Roja Española va a movilizar voluntarios de otros lugares para reforzar a los equipos que trabajan desde hace semanas en el campamento de primera acogida de inmigrantes del puerto de Arguineguín, donde este miércoles pernoctaron más de 1.300 personas, algunas al raso.

Según ha informado el responsable de Inmigración de Cruz Roja en Canarias, José Antonio Rodríguez Verona, la organización va a contar para ellos con personal que ya tiene experiencia, o conocimientos, en la asistencia a quienes llegan a España en patera o cayuco.

En cuanto a la sobrecarga de trabajo por la continua llegada de embarcaciones y el número de inmigrantes en Arguineguín, el responsable de Cruz Roja ha subrayado que "las dimensiones del puerto son las que son y tiene la capacidad que tiene".

Aunque asegura que los trabajadores y los voluntarios de la ONG están desempeñando su tarea "bien y tranquilos", "hay también una parte de gestión administrativa en oficina muy importante", la de hacer "un repaso de la información que es muy necesario”.

Durante el día de ayer, miércoles 21, siguieron llegando barcos de Salvamento Marítimo a Arguineguín con personas rescatadas de nuevas pateras, pero también se trasladó a un centenar de inmigrantes a otros recursos, entre ellos varios menores.

Este jueves, ha señalado Rodríguez Verona, está previsto que se completen los traslados que estaban programados la víspera, con el movimiento de 150 personas antes del mediodía.

De entre los llegados en las últimas horas, hay en torno a 150 que esperan a que se completen sus trámites de filiación para que les realicen las pruebas de la Covid-19.

En este sentido, el portavoz de Cruz Roja ha explicado que el miércoles 40 personas que habían dado positivo en los test fueron derivadas a un centro de Arinaga donde harán la cuarentena y otras 50 han sido derivadas otros recursos del sur de Gran Canaria.

A pesar de las lluvias, la pasada ha sido "una noche tranquila, sin ninguna intervención", algo que no ocurría desde hacía varias semanas. Rodríguez Verona reconoce que ha habido "algunos problemas con la lluvia", porque si bien "no ha llovido como en otros puntos de la isla, sí que ha habido personas a la intemperie" a las que Cruz Roja ha repartido ropa seca para evitar “problemas de hipotermia".